09 noviembre 2006

Orégano


A la vuelta de las vacaciones de verano descubrimos que al orégano no le gusta el agua. Después de preocuparnos durante 3 meses por que la planta no salía adelante, el riego que le dejamos puesto en agosto pensó que sería mejor proporcionar humedad general al jardín, y desde la primera noche se dedicó a remojar las baldosas de la terraza. Al llegar nos encontramos con un orégano espléndido. No ha vuelto a pedir agua hasta octubre.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Jee queremos fotos de los inventos fallidos también... q lo más bonito de los procesos de creación es la prueba y sobre todo el errorrr juas
bks No recordaba el oregano así, claro como siempre lo veo en bote.

Caléndula dijo...

Todo se andará... además esto es sólo la versión beta del invernadero... Vais a flipar con la versión final ;oP